El trabajo de cinco mujeres fue reconocido por la Gobernación del Valle.Su lucha empezó siendo muy pequeña. Nacer en un hogar de seis niñas con una madre cabeza de hogar marcó la suerte de Luz Margarita Arango, quien ha dedicado buena parte de su vida a ayudar a las mujeres en esa misma condición en el corregimiento de Guabas, en Guacarí. |
Entre clases de confección; un paso por la política, que le permitió impulsar guarderías infantiles, y ahora desde el campo de la gastronomía, esta mujer de 71 años, fue reconocida con el ‘Galardón a la Mujer Vallecaucana’, otorgado por la Gobernación del Valle para reconocer la labor y el liderazgo de las vallecaucanas.
Luz Margarita, quien trabaja en programas de capacitación para las mujeres, emplea a algunas de ellas o las ayuda a ubicar, recibió el reconocimiento en la categoría económica.
El galardón, pero en la categoría social, fue para Irma Escobar, de Tuluá, por su trabajo con mujeres en condición de desplazamiento.
Con ellas, adelanta actividades laborales y educativas, al tiempo que hace parte de la Mesa Departamental de Mujeres, desde donde impulsa proyectos.
Consuelo Cruz, de Pradera, quien en España adelanta programas de género y pobreza, fue reconocida en la categoría Política, e Isbelia Mejía, de Ansermanuevo, en la categoría cultural y deportiva por su trabajo con las bordadoras.
Rafaela Hurtado, quien ha puesta de acuerdo a 600 platoneras recibió mención de honor.
Su lucha empezó siendo muy pequeña. Nacer en un hogar de seis niñas con una madre cabeza de hogar marcó la suerte de Luz Margarita Arango, quien ha dedicado buena parte de su vida a ayudar a las mujeres en esa misma condición en el corregimiento de Guabas, en Guacarí.
Entre clases de confección; un paso por la política, que le permitió impulsar guarderías infantiles, y ahora desde el campo de la gastronomía, esta mujer de 71 años, fue reconocida con el ‘Galardón a la Mujer Vallecaucana’, otorgado por la Gobernación del Valle para reconocer la labor y el liderazgo de las vallecaucanas.
Luz Margarita, quien trabaja en programas de capacitación para las mujeres, emplea a algunas de ellas o las ayuda a ubicar, recibió el reconocimiento en la categoría económica.
El galardón, pero en la categoría social, fue para Irma Escobar, de Tuluá, por su trabajo con mujeres en condición de desplazamiento.